miércoles, octubre 15, 2008

Me pareció ver un lindo canario

El arco entre ceja y ceja

Calor agobiante por arriba y por abajo (correr en el sintético de la cancha 5 era como caminar sobre brasas). Las condiciones climáticas no estaban como para que se jugara un lindo partido de fútbol. Y de hecho, lindo, lo que se dice lindo no fue. Pero... a falta de belleza, buenos son tres puntos. Rocamora 1 - Champagne 0, resultado final, para que Rolo, como había anticipado, se tome un champucito, aunque caliente y sin gas.
Si me pidieran que defina al partido con una metáfora, les contestaría que no me rompieran los huevos(?). Si me lo volviesen a pedir y no me quedara otra, entonces, para los que no lo vieron les diría que lo podría representar una pareja que busca sin suerte su primer hijo (???). Fue así nomás, porque Rocamora siempre buscó: por arriba, por abajo, haciendo la carretilla (?). Pero nada. Hasta que cuando la única opción parecía conformarse con adoptar uno (un punto, claro), apareció el pendejo para alegría de todos.
Cuando hablo de pendejo me refiero a Tweety, el refuerzo que trajo "Casi-gol" Frías a comienzo de año (probablemente de lo mejorcito que hizo a nivel futbolístico este año). El mismo que el día de su primer amistoso casi juega en ojotas y que en la primera fecha quería entrar a la cancha con una bermuda de jean. El provinciano pachorra que luce dentro y fuera de la cancha esa sonrisa burlona y esa cara -siempre igual- de "mechupaunhuevolavida".


El Tweety y su caras, A) Después de ganar un palo verde; B) Después de tomar un café con leche con tres medialunas; c) Después de ser robado, ultrajado y violado en pleno barrio del Abasto.


El Canario, a falta de 10 minutos (creo), cortó, tocó y llegó hasta el área para empujar casi debajo del arco un preciso centro atrás, a pesar de los gritos de Turquito, desesperado para que no subiera ya que sólo quedaban 6 tipos y el arquero defendiendo (?). ¡Qué caso el de Turquito! Cada día me convenzo más de que un Cúper o un Alfaro o algún técnico de esos asquerosos, al lado de él es William Wallace. Complejo de equipo chico, quizás.


El partido se podría haber definido mucho antes. Lo que pasa es que a falta del Casigol, Tincho tomó la posta y se encargó de dilapidar todas y cada una de las situaciones de gol que tuvo a su alcance. Claro que tampoco lo ayudó en demasía el hombre que caminó la cancha mirando para abajo, ¿Pero Braca jugó al final, entonces? Me refiero a Peli, que volvió después de su "autosuspensión" y dio pena fisicamente. No estuvo tampoco muy lejos de eso, su hermano Tomi, que a decir por la papada que lució más que "Tomi" fue "Comí" Freixas.


No voy a ser tan cruel de todos modos. En un partido en el que la defensa no pasó grandes sobresaltos (si hasta Cole se proyectó y lo cepillaron con una murra que envidiaría el mismísimo Lugano), el medio tocó lindo con Franco (que le quiso hacer comprar un penal al árbitro, pero su actuación fue más bochornosa que la de Baby Echechecopar en la serie contrafuego), Juampi (que pidió jugar de 5 para no quedar mal frente a su novia) y Drigo.


Cierro la nota, justamente con Drigo, autor intelectual y material de la frase del domingo. Se había generado un tumulto y en el medio de la discusión, un pelado de Champagne cruzó toda la cancha para meterse. Apenas vio que se acercaba, Drigo, con su habitual diplomacia lo invitó cordialmente (?) a volver a su punta ya que "te cansas en venir hasta acá y después te veo que no podés levantar las piernas para correrme".

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