jueves, junio 28, 2007

El juego del invierno (???)

Alguna vez patentó la famosa frase "Me rompí dos culos y no doy más", que automáticamente quedó grabada en cualquier enciclopedia o anuario de frases del fútbol al que se puede recurrir.

Con esas 8 palabras, nuestro querido personaje, intentó justificar metafóricamente (?) un flojo rendimiento, no tanto a nivel futbolístico sino físico, allá por el año 2002.

Han pasado los años y los jugadores, pero aún perdura la vigencia de esa frase. Los oportunistas de siempre la han utilizado para vender posters, láminas, tazas y remeras. Incluso hay DJs que han remixado la frase, al estilo del también recordado "yo no fui" de Bart".

Hoy les acerco el último grito de la moda: el jueguito que hace furor entre los chicos y no tan chicos. Sentite por un ratito como Tincho: concentrate, tomá fuerza y... rompé un culo (uno sólo, porque la marca de dos es del maestro y es inigualable). Pero eso no es todo. Como bonus track, no se lo rompés a cualquiera, si no que la víctima es... Si, si, no te equivocaste. Es el mismísimo Martín Aldasoro.

Divertite y hacete adicto a este nuevo juego, con futuro de deporte nacional. Recomendación: no utilizar en los días previos a un partido. Puede ocasionar consecuencias nefastas.

lunes, junio 25, 2007

Se agarrandan (?) con nosotros


Luego de dos semanas de arcos sin redes, pelotas quietas al borde de la linea de cal y botines con tierra seca guardados en el fondo del placard, este fin de semana hay fecha nuevamente. El destino nos cruza unos viejos conocidos, de los que no guardamos un muy buen recuerdo precisamente: Garranda.

Probablemente, al simple simpatizante de Rocamora el nombre sólo le traiga recuerdos de la anteúltima fecha de la temporada 2006, cuando las escasas chances de ascender se desvanecieron con el tendal de situaciones que despilfarró el tecla, bien secundado por el resto del equipo. Tiros en los palos, tapadas agónicoas, pifies insólitos, sostenieron al uno de Garranda, apenas batido por una delicia del zurdo. La jugada del final (oportunamente subida a la página) fue la frutilla del postre de una tarde amarga.

Pero hay un antecedente aún más antiguo, que probablemente ni Safarian ni Fabbri (?) tengan en sus bases de datos. Desempolvando los libros de la historia del fútbol encontré una perlita para los amantes de las estadísticas. Efectivamante, hubo un partido previo con Garranda y fue en el año 2004. ¿El trámite del mismo? Un deja-vú del de la cancha 5.

Cuentan los memoriosos, que aquella mañana helada en la cancha 7, Rocamora intentaba prolongar su seguidilla de triunfos para meterse en el lote de punteros y conseguir (tal como finalmente sucedió) su segundo ascenso consecutivo. Faltaban apenas 5 fechas, y la ilusión de subir a la B estaba intacta porque aún restaba jugar contra el primero y el segundo de otrora. Pero antes había que superar este escolo llamado Garranda, mucho más accesible en los papeles. Lo que sucedió aquellos 90 minutos nadie lo sabe muy bien a ciencia cierta. Los recuerdos que se tienen son vagos y confusos.

Un gol del Tecla (que ni él se debe acordar), muchas situaciones desperdiciadas (uno de esos días en los que el Pollo está torcido), un enano que jugaba arriba con un pantalón de Racing, que se lesionó y en una gamba y todo empató y de CABEZA!!..., el vuelo estéril del Colombia... no mucho más. Otro 1 a 1 amarguísimo que nos sacó de la pelea por el título.

A mi no me lo contaron. Yo lo viví, pero igual me invaden recuerdos grises y lejanos, como si se hubiese tratado de un partido que jugué en otra vida.

Una jugada, sólo una jugada me hace acordar al partido de aquella mañana. Es una, pero esa sí que es imborrable y tiene el Pollo como protagonista. El emperador del gol estaba teniendo un partido nefasto, desperdiciando tantas o mas chances que el Tecla el año pasado. Faltaba un minuto de los 3 que habían adicionado, y una pared (no se de quién, supongamos de Pancho) lo dejó mano a mano. Sólo, mano a mano, cara a cara, presto para fusilar al arquero. Situación justa para una victoria épica. Pero al momento de disparar, pasó lo peor. Sí, el silbatazo del árbitro marcando un off-side "a lo torneo interno de la UBA" (es decir, más que dudoso). Y ahí el Pollo estalló. Con el impulso que venía remató furioso al arco (obviamente, para variar, la tiró arriba del travesaño) y vomitó un furioso y sutil (?): "¡Andate a la concha de tu madre!".

Conclusión: Inmediata expulsión y consecuente suspensión de 1 fecha (no fue mayor gracias a intensas gestiones de mediación) que le impidió jugar contra Misisón imposible.

El domingo esta la posibilidad de abandonar el karma de un equipo que no tiene buenos campeonatos, pero se agarranda (?) contra nosotros.

lunes, junio 18, 2007

El muro de Berlín


Mientras la población se divide entre los que juntan fondos para pagar el rescate del colombiano (supuestamente secuestrado; desde hace un mes que no se tienen noticias de él) y los que organizan manifestaciones con pancartas del rostro del patrón al lado del de Julio López y la frase "Aparición con vida, ya!", una persona se ha encargado de cubrir el arco rocamorense y lo ha hecho con creces.

Tres goles en contra en dos partidos no parecen representar una estadística como para vanagloriarse. Sin embargo, si tenemos en cuenta que uno de los goles fue de penal, otro por una desinteligencia defensiva en una pelota parada y el último luego de un mano a mano, debemos reconocer que la performance del 1 (¿O del 12?) alcanzó matices de perfección (?).

Y no sólo es destacable por su buena respuesta debajo de los tres palos, sino también porque desde el fondo comandó el aluvión goleador rocamorense (10 goles en 2 fechas), porque con su estirpe aria amedrentó a los ocasionales delanteros y porque ya demostró que puede jugar (y de hecho ya lo hizo) en cualquiera de las 11 posiciones (tiene mas posiciones encima que el Kamasutra).

Mientras se aguarda la reaparición del Colombia, el zurdo de Areco (de quién más se trata, si no de él), ya tiene un motivo mas para ganarse un lugar en el hall de la fama (?) de Rocamora. Esta vez no será por picarle la pelota a un arquero o por tirar un lujo en mitad de cancha. Esta vez será por mostrarle a las generaciones del siglo XXI que significa "el muro de Berlín (?)".

miércoles, junio 13, 2007

Más centro que Nueva York


7 minutos (?). Eso fue lo que tardó en venirse abajo toda la estructura defensiva de Barrilete Cósmico. En ese lapso, dos golazos alcanzaron para liquidar un partido a priori cerrado. Drigo, confirmando su alocado romance con la red, y el Pollo, demostrando que no pierde su instinto asesino a pesar de los años, sentenciaron un 2 a 0 incuestionable.

Pero para eso, fueron necesarias dos asistencias de lujo: la primera, un desborde sensacional por la punta izquierda de Peli, con pelota pegada al pie zurdo, y guapeada y todo para recuperar un balón que parecía perdido, que terminó con ese centro atrás europeo para la entrada franca del 5 (?).

La segunda, en cambio, del otro tripero neuquino; del que le sabe pegar con derecha; del Peli diestro. Tomi sacó un centro de derecha teledirigido a la frente del "Emperador" del gol. Yo lo vi desde el fondo y en seguida me di vuelta para festejar, y al lado mío lo vi a... Tomi!!

La duda, entonces, que se me planteó hasta el entretiempo fue: ¿Corre tanto este muchacho como para tirar un centro casi desde el corner y volver al centro del campo en 2 segundos? Si me huebisen dicho que sí, francamente me hubiese sorprendido y mucho. La verdadera respuesta, sin embargo... me sorprendió mucho más!

Quien había impulsado esa pelota, no había sido otro que el pie derecho de Peli. Si, el derecho, el mogólico, ese que decían que no le servía ni para apoyarse al atarse los cordones. Ese mismo sacó ese terrible centro.

Capaz fue un hecho único e irrepetible. Quién sabe. Yo no creo en las brujas. Pero que las hay, las hay.

domingo, junio 10, 2007

Y les hicimos precio...


Yo no soy economista, ni estudiante de economía, y por eso toco de oído respecto de las cuestiones cambiarias. Por eso vos, que sos economista o estudiante de economía, seguramente me podrás explicar mejor lo que es la paridad, lo que es el uno a uno.


Te tengo que confesar igual, que despúes de lo de hoy a la tarde, aprendí algunas cositas más que no tenía del todo claras. En el año 2001/02, los especialistas decían que la paridad había terminado, que el dólar ahora estaba a 3 pesos e incluso otros, los más pesimistas auguraban que la moneda norteamericana iba a llegar a los 4. Todos los economistas se agarraban la cabeza. Y yo no entendía por qué.

Y seguí sin entenderlo varios años, hasta hoy. Comprendí lo que es una paridad en los papeles que en realidad no existe (¿O me vas a decir que de verdad creían que estaban a nuestro nivel?). Interioricé qué diferente es el 3-1 a la mentada paridad. Y ahora tengo claro porqué te lamentabas con un posible 4 a 1. La profecía se cumplió: la inflación en el resultado es una realidad.

Debe haber sido una mala tarde, Barrilete. Para capitalizar el triunfo, tuvimos un costo importante. Pero la curva en la trayectoria del disparo de Drigo y la elasticidad del Pollo para conectar de cabeza un macrocentro de Peli, sumieron a tus aspiraciones en una depresión. Quisiste reactivar el resultado a través del monopolio de la pelota, pero tus volantes tenían muchas ofertas de pase y el zurdo poca demanda de trabajo. Tanto gasto, en el segundo tiempo se sintió. El índice, entonces no permaneció fijó, si no que sufrió una importante variación hasta alcanzar el 4-1. Y eso que te hicimos precio. Ahora me imagino cómo estás, en plena economía de guerra.

Amigos rocamorenses, gracias por escribir hoy por la tarde, una nueva página épica, a la altura de los grandes triunfos contra Misión Imposible, Junín y Costa Rica. Este triunfo, como los otros, son los que marcan al club, los que hacen que a la institución se la mire con respeto, de los que el mundillo de Ciudad Universitaria comenta azorado. Nombrar a alguno en especial, sería muy injusto para con los demás, porque creo que se trató de una exhibición táctica, con mucha entrega y amor propio para no dar ninguna pelota por perdida. Falta mucho, pero después de lo de hoy, creo que estamos para grandes cosas.

Para pensarlo: ¿Vieron que, a diferencia de lo que le pasó al país, en el único momento en el que no hubo paridad fue durante los ´90?

lunes, junio 04, 2007

Según pasan los años

Año 2004

Año 2005

Año 2006
Año 2007

Lo que se desprende de las fotos:
-No hay registros del año 2002 (el del nacimiento), y del 2003 (año del primer ascenso) sólo hay una foto (que a esta altura es casi una reliquia -?-) y luce en la pared del cuarto de Drigo.

-Braca, juegue en el puesto que juegue, tanto en las fotos como en la cancha, siempre termina yéndose arriba.

-El primero de la izquierda empezando de abajo (año 2006), es seguramente el jugador mas baldosero e intrascendente que lució la camiseta albiazul. Aunque es cierto que el último de la fila de arriba (año 2004), le pisa los talones. Los dos a un ballotage.

-La foto del año 2004 corresponde al clásico con Junín. Para regodeo de los detractores del tecla, éste no jugó el partido por encontrarse de viaje, alimentando el mito de que se borra en los partidos complicados.

-El Frías que sí estuvo ese día fue Martín, el otrora 4 de Rocamora que fue titular en el ascenso 2003 y se retiró para jugar en Furano Fc. Con él se fue también Jackson, representando el partido contra Junín, hasta el momento (¿y para siempre?) el último que jugó el escurridizo delantero, joyita de las inferiores.

-Vean las últimas dos fotos: ¿Piojo tiene problemas en las rodillas o no se agacha de puro pajero?

-La evolución de la indumentaria: El "mantel" primera camiseta azul y blanca de la historia, le dejó el lugar a la del 2005, que no era ni una servilleta. Su incomodidad y su fama de yeta (el 2005 representó la peor temporada de la institución), hizo que fuese reemplazada al año siguiente por las Nassau, sponsor oficial del club. Este año se le agregaron pantalones y medias.

-Rocamora 2005 está reforzado por 4 "bordolinos" de esa época. Sólo quedan hoy en el club de Cuba Drigo y "los vestigios (?) del batata".

-Pasan los años pero Javito siempre está igual. Hasta en las poses.