Hoy por la tarde presencié un hecho histórico, de los que quedan en la retina por siempre: una fenomenal carrera de caballos. ¿Qué tiene que ver esto con Rocamora? Bueno, que se yo... Javito era el dueño del 2% del caballo, Pablo es socio del Jockey club, y además el tranco de Pure Breavury (potro al que fuimos a ver) me hizo acordar al peor Braca volviendo del área rival en el segundo tiempo. La cuestión es que luego del desempeño de nuestro caballo propongo nombrarlo mascota oficial de la institución (de acuerdo al desempeño acorde a lo mostrado por Rocamora este fin de semana).
Para el que no pudo concurrir al hipódromo de Palermo, los hechos se sucedieron así: La carrera se largó con exactitud a las 15:30. La inconfundible voz del relator desperdigaba la emoción de una atrapante carrera en la que Pure B. (nro 6), luego de corridos 400 metros, ocupaba una amenazante segunda posición, a medio cuerpo de la punta. Habiendo el malón doblado en la curva, los espectadores, apoyados contra la baranda, solo veíamos a un montón de caballos correr como locos hacia la meta. Quedaban 100, 80, 50 metros... faltando diez, 7 furiosos potros pasaron como una exhalación por delante nuestro, pero llamativamente, ninguno de sus jockeys lucía la pintoresca chaqueta color rosa fosforecente que vestía el "duende" que montaba a Pure.
Es que de hecho, tampoco Pure había pasado. ¿Qué había pasado entonces con nuestro potro?
Giramos lentamente la cabeza y allí apareció. Al trote tranquilo ("si le ponías un palo arriba parecía un caballo de calesita", dijo piojo), casi caminando ("si le sacaba una foto, seguro que no me salía movida", dijo otra persona) como si fuese uno de los ponys que pasean pendejos en la puerta del zoologico, Pure B. pasó delante nuestro y alcanzó el disco. Es increible las caras que coronaron semejante actuación, los gestos adustos, las miradas fijas en la nada... sencillamente impagable. Tuve que alejarme unos pasos para largar la risa incontenible.
Debo reconocer que nunca había ido al hipódromo, pero si alguien me asegura que todos los días pasan cosas como esta voy a empezar a ir más seguido. Y eso que yo le jugué 5 mangos a ese caballo (¿Rata, yo? Pará, pará, nadie puede ser tan boludo de apostar 50 mangos por ese pobre animal... ¿Que piojo apostó esa suma? ¿En serio?Ehhh, bueno, no dije nada entonces). Pero los volvería a jugar porque Pure Bravebury marcó un antes y un después. ¿En la historia del turf? No, en la del humor negro.
Y con esto termino. Es la ULTIMA vez hago un post de un tema ajeno a Rocamora (más allá de que acepto firmas para nombrar al noble animal mascota oficial de Rocamora).
(Reproducción de la carrera. Todos los caballos juntos se acercan a la meta. ¿Todos? Bueno, es una forma de decir. Pure Bravebury viene dos fotos más atras)
5 comentarios:
Pure Bravebury es un caballo que puede jugar de enganche. Sabe hacer la pausa.
jajjajajaaj q buen post por favor. Esa tiene que ser nuestra mascota.
Gracias por remarcar: ¨braca en sus peores momentos¨.
JAJAJA me estoy muriendo... te pasaste facha. Que javito no ponga la plata que le falta pagar de la cuota de rocamora... el ya puso la mascota "Pure B." JAJAJA...
Keep up the good work. thnx!
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Very pretty site! Keep working. thnx!
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