Falta todavía para el comienzo de la pretemporada. Ni hablar, para que empiece a rodar la pelota de manera oficial. No obstante, varios integrantes del plantel se tomaron muy en serio aquello de que en las vacaciones “hay que desconectarse de todo y sólo comer y dormir”. Las calorías en exceso ya se están haciendo notar y los cuerpos lucen cuál esculturas...cual esculturas de Botero, el artista colombiano.
Pongamos el caso de Braca. La semana pasada estuve con él y me invitó a comer un asado. “No sabía que había lechón”, atiné a decir apenas ingresé al quincho. Pero no era un lechón si no el mismísimo anfitrión con el torso desnudo y en un desagradable exhibicionismo de los efectos de la bondadosa cocina patagónica.
Para echar más leña al fuego, lectores me envían a la redacción escandalosas fotos de dudosa veracidad que certifican mis dichos. Les muestro, por ejemplo, una de ellas, aunque previo a ello es necesaria un breve aclaración. Braca alguna vez jugó de 9 y quienes lo vieron (entre ellos Pekerman) afirman sin titubear que tenía cosas de Ronaldo y de Adriano. Obviamente aclaran de inmediato, que lo que tenía era la panza de Ronnie y los problemas con el alcohol del Emperador. Ahora me llega esta foto directamente de Rio y no me queda más que darle la derecha al doble 5 y mandarla a la papelera de reciclaje por su alto contenido de photoshop.
La que si no está trucada es la increíble foto que me apareció en una casilla cuya dirección era “colombiano”, pero que al final no era el colombiano si no el zurdo (?). ¿Que no aparece Betancourt? ¿Que fracasó la misión de paz de Kirchner? ¿Qué las FARC no dan tregua? Puro humo de la prensa. Y si no que lo diga el 1, completamente estresado desde las paradisíacas playas de Santa Marta y escuchando reaggeton en su masculino Ipod rosa.
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