domingo, julio 27, 2008

Ver para creer (en los milagros)

El miércoles la mano pintaba negra. Entre suspendidos, lesionados y gente de viaje, con suerte juntábamos gente para evitar el WO. Lo más cuerdo que se escuchó en ese entonces para graficar una realidad paupérrima fue la frase: "Si sacamos un punto este sábado... es milagroso".

El encendido discurso de Rolo "soy de Rocamora desde antes de que se fundara" Speroni (cuya transcripción aún perdura a la derecha de la pantalla), conmovió a los que dudaban todavía si jugar o no y le puso la piel de gallina a los que ya habían confirmado que iban a poner la cara. Por eso, el 1-0 final es en cierto modo gracias al Martin Luther King blanco (?).

Digo en cierto modo, porque el otro 98% de la victoria hay que buscarlo en el planteo inteligente, la concentración, la garra y demás sustantivos del estilo que siempre aparecen cuando se gana un partido importante y que me aburre recordar.

Coronel Cañones no es el Real Madrid ni mucho (muchisímo) menos. De todas formas, la parada pintaba difícil por algunas bajas. No muchas, sólo nos faltaban el capitán, el goleador, el enganche, el arquero titular, las promesas y el jugador más experimentado. Casi nada (?).

Entonces, el 1 a 0 final (que no fue más abultado porque nos comimos una cantidad de goles infernal) merece ser festejado como se festejó (aunque eso será comidilla de otro post).

Estas son las esquirlas del milagroso sábado, en la que la multitud que acompañó a Rocamora pidió el destierro de los caudillos del plantel:
-Peli se puso el equipo al hombro los primeros minutos y tuvo premio cuando la clavó desde afuera del área contra el palo. ¿El festejo? Dedicatoria a Tamara, su novia, con gestito y todo. Yo no alcancé a verlo, pero un artista que andaba por la zona lo graficó así (?):


Después de eso, probablemente por el temor de tener que repetir el festejo, se comió una infinidad de goles que de haberlos convertido lo habrían transformado en el heredero de Sergio Simionato.

-¡Volvió el Piojo! 45 minutos con no mucho trabajo y sin grandes contratiempos resumen lo que fue el regreso a la actividad del "smoke-seller". Lo mejor sin embargo, lo demostró afuera de la cancha, cuando luego de que al 3 rival le cobraran tres laterales mal sacados, le explicó a Tamy cuál es el secreto (con mímica y todo) para ser un gran sacador de laterales. No es para desalentar a los futuros alumnos, pero les prevengo que el Piojo es un tipo que hace laterales así:

Píensenlo dos veces antes de pagar la matrícula.

-El que la rompió fue el Tweety. Con seguridad, solvencia y clase cumplió con creces el hacerse cargo de sostener una defensa diezmada. Claro que en mucho ayudó el apoyo de su familia, especialmente su papá, (que para alegría de Peli vino vestido de arriba a abajo con pilche de Estudiantes de La Plata) que desde afuera repartieron gritos para enmarcar en el "hall de la fama". El mejor: "¡¡¡Parece que me lo quiere violar al pibe!!!", cuando Cole aguantaba agarrones y el árbitro mostraba fatiga hasta para soplar.

-Y hablando de Cole, el lateral izquierdo mostró su mejor cara en lo que va del 2008. Especialmente en esa jugada que se fue a presionar al campo contrario, peleó la pelota, la ganó y forzó un córner a puro amor propio. Lo malo: el árbitro estaba charlando en su quintita, digo en el medio campo, y no vio nada de lo que pasó. Para salir de la situación embarazosa, arregló todo con un saque de arco (?) y un "y... es que no vi nada" (?).

-Con Pollo y Drigo suspendidos, se reeditó una vieja dupla en la ofensiva. Pablo y el Zurdo mostraron mucha predisposicón para presionar en la salida (muchas veces conmovedor el esfuerzo) y complicaron todo el partido con paredes y toques de primera. Nada que objetar. Bueno, algo sí: no convirtieron ninguno de los dos. Y eso que tuvieron chances, eh? No hay que ser tan exigentes, de todas maneras. Ni que fuera obligación que metan goles por el hecho de ser delanteros (?).

-"Uy, y ese quién es? No me digas que juega Jurgen Klinsmann", se escuchó antes de comenzar el partido, instantes después de que un urso que andaba por ahí se calzara la 9 de Coronel Cañones. Con el correr de los minutos se comprobó que era más la pinta que otra cosa y que apenas se separaba del piso unos 5 a 10 centímetros cada vez que saltaba (con eso igual alcanzaba los 3,40 mts del alcance (?)). Braca le ganó de arriba en todas, y hasta Turquito hizo lo propio con la cabeza. Esto último terminó por derrumbar el prestigio que se había ganado el gigante en los primeros minutos.

-Pancho fue un pistón por la derecha y en el ida y vuelta pasaba de wing derecho a doble 4. Corrió como un animal y terminó medio cansado. Se justificó con un incomprensible "es que estoy volviendo de una lesión y me falta ritmo" (?). Si alguien me asegura que después de mi operación voy a correr por lo menos la mitad de lo que corrió este muchacho el sábado firmo donde sea.

-Ale volvió a jugar con Rocamora y ya va alimentando el mito de que trae suerte. Dos partidos jugados, dos ganados, 4 goles a favor y 0 en contra. Una mano negra lo borró de la lista a minutos de empezar el partido y eso le costó la titularidad (por tener que ir a la oficina de fútbol a arreglar el malentendido). Lo arregló, volvió y su figura tiene destino de talismán (?).

-"Los goles que se erran en un arco se sufren en el propio". Esa es la teoría. Por suerte, en la práctica los goles errados sólo se sufrieron. De todas formas despilfarrar cosas en un país que tiene al 50% de su población debajo de la línea de la pobreza es imperdonable. Y más si esas cosas son goles que valen oro (?). Que no se repita.


En fin, los empates de Reseros, Angellotti y Los Petes acortaron la brecha de los punteros con sus perseguidores de un torneo que ahora lidera también Villa Gessel (cómo duelen esos dos puntos perdidos en la primera fecha). Faltan 8 fechas y cualquier cosa puede pasar (bueno, no cualquier cosa, pero si muchas). Lo único que espero es que llueva algún que otro fin de semana porque si no de acá a dos meses nos quedamos sin fútbol hasta el 2009.

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