viernes, agosto 24, 2007

Sin caja



Se acerca el vencimiento de la segunda cuota del torneo y anteayer por la tarde, retornando a mi función de tesorero de la institución, caí en la cuenta de que las arcas del club se encuentran semivacías para enfrentar la inminente obligación fiscal (?).

Desesperado me puse manos a la obra en la búsqueda de medios de financiación para solventar el compromiso. Como primera decisión, me dirigí, presto, a la oficina de fútbol de Ciudad Universitaria para intentar averiguar si se podía pagar con tarjeta. No sólo me contestaron que sólo se podía cancelar la deuda en efectivo, sino que me aclararon que las amarillas y las rojas del Pollo no reemplazan a las tradicionales Visa, Credencial, etc.


Como la situación se tornaba cada vez mas oscura y no veía luz en el fondo del túnel, tuve (repito que lo hice porque no tenía más alternativas) que tomar medidas mucho más drásticas. Sé que lo hice sin consultar, y que varias de van a ocupar el tiempo de mesas y mesas de conversación en cafés y bolichitos por el estilo. Pero la crítica situación financiera no me dejaba mucho margen de acción. Para tranquilidad de todos, les confieso que me asesoré con la autoridad máxima de la institución deportiva más prestigiosa del país, y fue él, un hombre gordo de papada prominente, quien me brindó las soluciones.

Estas fueron las medidas que tuve que adoptar para obtener fondos:




  • Vendí el 40% del pase de Tomi, la última joya de las inferiores, a un grupo de empresarios. Lado positivo: me quedé con la mitad del pase (el otro 10% pertenece al Club Santafesino de Neuquén) (El paquete incluye además la cesión del 30% de los pases de 14 jugadores del plantel)

  • Organicé una gira por Neuquén para jugar un octogonal en el término de dos días. Salimos hoy, jugamos a la tarde y a la noche, y el sábado todo el día. Si llegamos a la final, la tendríamos que jugar el domingo a las 5 de la mañana y de allí tomar un avión para no perder por WO con Junín. Lado positivo: El aeroparque queda cerca de Ciudad Universitaria.

  • Alquilé la cancha 2 para que hagan en el predio festivales de rock. Lado positivo: Puede llegar a tocar Anzuelos como banda soporte.

  • Vendí al Colombiano, pese a no tener arquero suplente, al fútbol ruso. Lado positivo: Como tiene problemas con el pasaporte (?) va a seguir atajando en el club.

  • A partir de este momento Rocamora ya no se llama mas así. El nuevo nombre es Rocamosa o Rocamo s.a., tal como está inscripto en la inspeción general de justicia. Lado positivo: ¡son todos accionistas!


(Y algunas otras más, que es mejor que desconozcan, je)



Con todo esto junté apenas $45,33, que no alcanzan ni para pagar un quinto de la cuota, pero para encargar un par de bondiolitas en un carrito de la costanera después del partido son ideales.

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