La parte morbosa del campeonato

Los jueves son días de gran expectativa. En realidad siempre lo fueron desde que en el cine se renuevan los estrenos. Pero en la actualidad, y para los que juegan en el interno de la Uba, el interés en la llegada de dicho día reside en otro motivo: el jueves es el día del tribunal.

Si bien las suspensiones se determinan en el miércoles al mediodía, la publicación de los veredictos recién llega al resto de los mortales al día siguiente. Por lo tanto, por costumbre, el jueves es el día en el que religiosamente se abre la ventana indicada y se desata, consecuentemente, el lado morboso del torneo (?)

Porque las resoluciones del tribunal son como los avisos fúnebres. Uno siempre los mira. De reojo, al menos, uno siempre quiere estar al tanto de si la parca se llevó algún conocido o familiar o viejo compañero de colegio.

Y, a la vez, una vez leídas las escuetas dedicatorias, queda la sensación de curiosidad respecto de cuáles fueron los motivos que llevaron al deceso.

En el tribunal es igual. ¿A quién no se le carcome el cerebro pensando en que fue lo que motivó una sentencia de la talla: Pepito Gonzalez, DNI 23.222.222, suspendido hasta las 13:35 del día 14/5/2114?, ¿O sino, equipo Pendorcho, se le descontarán 555,5 puntos al final de la temporada?

En lo que respecta a Rocamora, el jueves nos desayunamos con la desagradable (?) noticia de que al Pollo le habían dado una fecha de suspensión. Bien lo del goleador, que es el pichichi del campeonato con 7 goles, y a la vez el puntero de la tabal de expulsados, con 2 rojas en 7 partidos (y eso que este es su año tranquilo -?- ). Para los que no saben qué fue lo que motivó su despido del terreno de juego antes de que se cumplieran los 80 reglamentarios, prometo la semana que viene deleitar a la audiencia con la palabra del protagonista.

Y si de paso, en esa recorrida sádica por el club de los suspendidos, te encontraste con las 6 fechas que recibió el hombre de Laser Quest por sus bravuconadas, también tengo un videito con material en vivo y sin editar (no se hacerlo), para que nadie se sienta con esa sensación de vacío horrible que pocas veces se puede sanar.

(El pollo viendo al partido de afuera. ¿Quién fue el mala leche que le sacó tantas fotos así? Tengo la computadora llena de imágenes del "Emperador del gol" parado al lado de la linea de cal. Así no ayudan a disminuir el promedio de expulsiones. Lo sugestionana de entrada, viejo.)