Revolví y revolví en la PC de mi casa, pero no hubo caso. La búsqueda fue infructuosa. En el 2004 no hubo medios gráficos que comentaran las alternativas del clásico con Junín. Mucho menos existía el blog. Entonces, dadas así las cosas, no me queda otra que ponerme a describir un partido casi calcado al clásico que se jugó 3 años atras.
Mismo rival, misma cancha, mismo horario, misma temperatura. Con Junín en uno de los extremos de la tabla y Rocamora peleando el ascenso. 1-0 cerrado el resultado, pero que pese a las pocas llegadas claras a los arcos se juega con muchisima intensidad. No hay medio, prácticamente. La pelota va y viene. Se ataca con mucha gente y el peligro parece inminente. Sin embargo cuesta abrir el marcador.
Igualito al 2004. Junín yendo con sus 3 puntas, casi 4. Rocamora bien parado, saliendo de contra. Pasan los minutos y el marcador sigue en blanco. Hasta que llega un miembro de la familia del gol (Repetto) y la clava en el arco que da a la cancha de hockey. Es la mínima diferencia, pero alcanza y sobra. O mejor dicho, no sobra, pero alcanza para alzarse con otros 3 puntos vitales en la búsqueda del objetiva.
Se festeja el doble, porque es un clásico, porque fue chivísimo y porque empató el segundo. Hay que felicitar a Junín, porque demostró que, más allá de la posición en la tabla, es un grande de la categoría y no le pesa enfrentar al puntero, como otros equipos que al momento del baile se fueron a su casa con la canasta llena de goles y humillación.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario